Audi TTRS
Cuando combinas las siglas TT con las de RS todo indica a una situación win/win. Una unión ideal, un matrimonio sin fallos, una suma sin decimales, una cocktail explosivamente bueno...
Sin embargo voy a ser algo crítico. El coche es espectacular, no me mal interpretéis, pero después de probar diferentes motorizaciones en el Audi TT quizás esperaba algo más. Y las expectativas, un poco altas, no se acabaron de cumplir.
Muchos colegas estarán en desacuerdo conmigo, ya que por la mayoría el TTRS Roadster es más que un coche, es un juguete de aquellos que disfrutas constantemente. Y es verdad; yo también lo afirmo. Es un automóvil extraordinario. Pero también los es el TT 2.0 TFSI. A decir verdad, creo que un 2.0 TFSI de última generación se acopla mucho mejor al chasis del TT creando un conjunto mucho más equilibrado en un automóvil de batalla corta y descapotable.
El propulsor 5 cilindros que monta el TTRS tiene unas reacciones algo más lentas de las que uno se espera y eso crea algo de frustración. Evidentemente sus prestaciones y sus cifras no dejan indiferente a nadie. 400 CV de potencia y una aceleración de 0 a 100 km/h en 3.9 segundos. Además su envidiable chasis y su banda sonora hacen que la conducción deportiva sea mucho más que un placer. Se convier- ten en una religión donde todo es devoción y no existe la penitencia. El TTRS es preciso y su tracción quattro® lo convierte en una arma muy efectiva en condiciones de lluvia y superficies bañados o con poco agarre. Sin duda un descapotable se disfruta mucho más a cielo descubierto pero incluso con la capota cerrada uno se da cuenta de la calidad del vehículo; pues los niveles de insonorización son dignos de alabanza para un vehículo con techo de lona. Su diseño es también espectacular. Desde su lanzamiento y después de varias generaciones, el TT sigue siendo el icono del lenguaje formal de Audi. Un automóvil deportivo con mucha personalidad que en su versión RS enfatiza mucho más este carácter. Pensándolo bien, la verdad es que no esta tan mal. ¿No crees?
Fotos y Texto: Oriol Vilanova @oriol.vilanova
Follow us in Instagram @gentlemendrive.com
